EN EL JARDÍN
 En mitad de la vereda,
de pie, mirando al horizonte.
Desnudo, dejando que el sol bañe mi piel.
Rompiendo mi soledad, la brisa del mar.
Abriendo los ojos al perfume de la vida.
Aquí, justamente aquí,
en el jardín de la vida,
erguido aún estoy.
 
Una miscelánea de flores
en las orillas entona,
su sinfonía de colores sin fin.
 Rojos de pasión, con fragancia de amor.
Amarillos, anunciando un adiós no esperado.
Delicados, violetas, verdades, me hacen intuir.
Blancos deslumbrantes de sonrisas sin descubrir.
Insinuantes verdes, esperanzas maquillan.
Serenos azules del alma, alentadores.
Amenazan también, grises en el horizonte
 
No sé,
sí, un sueño fue,
o sí, tal vez divagué.
Pero vi que en el jardín de la vida,
la vereda continua.
 
Y aquí, justamente aquí,
al final de lo caminado
y en el principio
de lo no andado.
¡Comprendo!
 QUE VIVIR
¡ES SEGUIR…!

 
Benet da silva 09 de junio de 2021

Corregida 23 de febrero de 2024

No hay comentarios:

Publicar un comentario

PUNTO DE INFLEXIÓN   Laura continuaba con su nueva vida, la cual comenzó aquella noche cuando se cruzó con la imagen que reflejaba de ella, ...

RETAZOS